sábado, 14 de enero de 2012

INMIGRANTES REFUGIADOS


Ángela Cáceres, Nieves Laynez y María Pérez, hicieron su exposición acerca de los inmigrantes refugiados. Me parece necesario estudiar bien los procesos que se siguen como respuesta a una problemática constante, sobre todo porque pienso que es un tema acerca del cual se habla mucho y se sabe realmente poco.

España ha pasado de ser un país emigrante, cuyas personas salían por la necesidad de buscarse una vida mejor, a ser un país receptor de inmigrantes, como consecuencia de la instauración de la democracia y el auge económico de los últimos 30 años. Aunque cifras recientes informan de que muchos españoles están volviendo a salir y que ya hay de nuevo más emigrantes que inmigrantes, no tenemos que olvidar que son cifras que analizan los movimientos, pero los que llegaron antes ya están aquí y es necesario dar una respuesta válida y eficaz para regular la situación.

Cuando hablamos de inmigrantes, y en concreto de los que aquí analizamos, nos referimos a personas que entran a España por necesidad.  Necesidad de una vida mejor, o simplemente de una vida. Es curioso que el término y su connotación cambien radicalmente cuando hablamos de personas que entran en nuestro país con recursos económicos para montar sus empresas, para hacer turismo, para ocupar puestos de trabajo calificados… Pero como estos últimos no son población en riesgo de exclusión, no nos incumbe estudiarlos.

Las motivaciones que llevan a una persona que en su país no encuentra satisfechas por la falta de recursos sus necesidades son aprender una nueva forma de vida, encontrar trabajo, mejorar la vida de sus familias, etc. Algo, además, que convierte a España en foco para la inmigración es la legislación vigente, el clima y la cercanía al continente africano. Pero, desgraciadamente, las consecuencias a las que tienen que hacer frente por arriesgarse por este sueño son, en la mayoría de los casos, mayores que los beneficios que logran. Todos ellos tienen que abandonar a sus familias, con el daño emocional que eso produce, son manipulados por mafias, se endeudan para salir de su país…

Las formas de llegada son, repetitivas y, en realidad, poco variadas. Las más comunes son con un visado de turismo para luego quedarse de forma irregular, cruzando el estrecho en pateras o barcas de plástico que tienen que comprar a precios muy elevados, o escondidos en camiones de transporte de mercancía.
Es mayor el número de hombres inmigrantes que de mujeres, sobre todo de los que llegan de África, puesto que las mujeres tienen dificultades añadidas para salir de sus países, aunque, sin embargo, hay otros países (como Rumanía) de dónde la mayor parte de inmigrantes son mujeres. Por otra parte la mayoría de inmigrantes son bastante jóvenes, lo que contribuye a rejuvenecer la población española.
Los más afortunados que consigue llegar a España y encontrar un puesto de trabajo son empleados en labores como el campo o el hogar, la hostelería o la construcción. En realidad ocupan los puestos de trabajo que ningún español quiere durante una buena situación económica.

Las formas de permanecer en España son fundamentalmente tres:
-   Arraigo; cuando vienen a España y tras años justifican su estancia.
-  Reagrupación familiar; una persona está aquí en España residiendo y trae a algunos familiares.
-  Contingente; con contrato desde el país de origen.

Los problemas a los que se enfrentan cuando tienen que adaptarse a un nuevo medio son peores de lo que seamos capaces de imaginar sin estar es esa situación: desde tener que aprender un idioma nuevo y totalmente distinto, superando (o no) las barreras culturales que la sociedad de acogida impone, la falta de recursos económicos, la falta de personas cercanas con relaciones de afecto, etc.
Los recursos de los que se dispone para tratar de dar una respuesta a esta situación son principalmente los pisos de acogida, los pisos de refugiados, los albergues municipales, el área laboral, los servicios jurídicos, servicios de mediación, ONG’s, cursos de formación, cursos de idiomas, etc.

Los inmigrantes refugiados son un colectivo bastante desconocido. Pienso que esto se debe a que cuando no lo ves no lo concibes, “nadie” lo cuenta, “nadie” habla de ello, a “nadie” le importa.
La Convención de 1951 sobre el Estatuto de los Refugiados , define a un refugiado como la persona que: "debido a fundados temores de ser perseguida por motivos de raza, religión, nacionalidad, pertenencia a determinado grupo social u opiniones políticas, se encuentra fuera del país de su nacionalidad y no puede o no quiere acogerse a la protección de tal país o no quiere regresar a él a causa de dichos temores..."
Tipos de Refugiados:
-           Desplazados internos: Son refugiados que no ha cruzado las fronteras nacionales.
-          Los refugiados de los campamentos: Son refugiados que abandonan  su país y solicitan asilo y protección en otra nación, los llevan a campamentos y no la integración en el país de acogida.

-          Refugiados y solicitantes de asilo en áreas urbanas: son grupo invisible de personas, desplazadas, son los refugiados extranjeros que, tratan de pasar inadvertidos en alguna área urbana del mundo.
-          Inmigrantes presos: Son personas que han cruzado las fronteras  que acaban en los centros de detención.
-          Personas sin Estado: Los apátridas son personas sin estado que sufren al ver cómo se les niega el retorno a su hogar y se les niega la nacionalidad.

Las causas de la persecución y, por lo tanto, del miedo que tienen estas personas de volver a sus países de origen y por lo que se encuentran en esta situación son cuestiones, fundamentalmente, de raza, religión, nacionalidad, clase social o  tendencia política.
Los inmigrantes refugiados cuentan con una serie de derechos reconocidos, como ser provistos de papeles de identidad y documentos de viaje que les permitan salir del país, recibir el mismo trato que los nacionales (religión, educación, tribunales, SS, autoridades tributarias…), recibir un trato igual que los extranjeros (sindicación, empleo, organizaciones), y disponer de los mismos derechos que el resto de extranjeros (propiedad, trabajo, vivienda).

Como vemos las personas que dejan su país de origen para adentrarse en otro país totalmente desconocido para ellos, en casi todos los ámbitos, no piensan precisamente en la categorización de inmigrante que se les hará en el nuevo país de acogida. Una vez en este país existen dos tipos de clasificación: si eres rico o te alojas en un hotel te conviertes en un turista, sin embargo de cualquier otra forma eres un inmigrante.
Es importante ver el trato que se les dan a los inmigrantes, ya que dependiendo del lugar de procedencia recibirá un trato mejor o peor, y si procede de un lugar donde no tiene una vida digna, con unos derechos y necesidades básicos cubiertos, el trato que recibirán será peor, aún más en tiempos de crisis. Los hemos tenido la suerte de vivir en un contexto favorable para el desarrollo de nuestras vidas, somos personas egocéntricas, que solo pensamos en nuestro bien y no nos importan las pésimas condiciones en las que viven los demás, circunstancias que deben ser cambiadas con nuestra ayuda. Debemos conseguir que se respeten unos derechos fundamentales en todos los países y que se cubran unas necesidades básicas para poder sobrevivir, para vivir como una persona.

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